Con la llegada de la primavera, además de ver la hermosa floración de diferentes especies naturales, sentimos incómodos síntomas tales como: estornudos de predominio matinal, coriza nasal, picazón de nariz, garganta, ojos, obstrucción nasal, prurito e irritación de la piel, todos estos asociados a síntomas comunes entre las personas que padecen alergias estacionales.
Una alergia estacional es aquella que se produce durante una estación específica del año, generalmente en la primavera. El peak en nuestro país generalmente ocurre en la época de la polinización, lo cual es clásicamente durante septiembre, pero eso se puede desplazar antes o después dependiendo del año y del momento que se produzca la polinización.
Conversamos con la Enfermera, MBA en Salud y Coordinadora del área de Salud del Convenio UPA-UTEM, María José Catalán Madriaza, quien entregó recomendaciones para identificar, diferenciar y tratar la alergia primaveral.
¿Qué sentimos si tenemos una alergia estacional?
La rinitis alérgica se caracteriza por estornudo, picazón nasal y en los ojos, incluso algunas personas desarrollan picor del oído y faríngeo. Lo otro presente es la rinorrea, o sea la mucosidad que puede producir este proceso inflamatorio alérgico en la nariz, como la congestión nasal. En cuadros más complejos, las personas pueden incluso asociar alguna hiperreactividad bronquial o asma, sintiendo el pecho más apretado, obstrucción bronquial y tos.
¿Qué diferencias hay entre los síntomas de la alergia, el COVID-19 u otro virus?
Existen diferencias entre una alergia y una enfermedad viral como el COVID-19. Lo primero que debemos tener en consideración es que, una alergia es un cuadro que se repite año a año, con más o menos síntomas. Una alergia no presenta fiebre, tampoco compromiso del estado general, no tiene dolores musculares o dolores articulares. Sí pueden compartir síntomas, tales como: mucosidad y obstrucción nasal, también alteraciones del olfato, como en el COVID, en que el olfato se pierde, lo cual puede confundir a las personas, pero en el fondo estos síntomas son mientras dure la temporada de alergia.
¿Cuále son los Tratamientos y terapias actuales que podemos usar?
Existen diferentes tratamientos y terapias complementarias que se utilizan con muy buenos resultados. Lo primero que debemos prevenir o evitar, es el contacto con alérgenos. Para esto es recomendable:
- Cerrar las ventanas del hogar durante la tarde, que es el momento en que decantan los alergenos circulantes y cuando se produce mayor entrada de alérgenos por la polinización.
- Uso de mascarilla, esta medida ayuda sobre todo cuando se realizan actividades al aire libre, salir al campo o barrer el jardín, en este periodo.
- Lavarse continua y permanentemente con agua, manos, cara y nariz principalmente.
- Ducharse en la mañana y en la tarde luego de volver a la casa o antes de dormir, para lavar los alérgenos que puedan haber quedado en la piel, pelo y ropa.
- Ventilar la casa, rutinariamente todos los días.
- Evitar caminar en la mañana o hacer ejercicio en la mañana, ya que en ese periodo del día hay más liberación de pólenes.
- Para realizar deporte al aire libre es importante utilizar protección ocular como gafas de sol o de bicicleta.
- Si tienes alergia al pasto o al trigo, evitar lugares donde lo estén cortando.
- Si andas en auto evita abrir la ventana, es preferible usar el aire acondicionado.
- Evita secar la ropa en los días de mayor polinización, ya que el polen se introduce en las fibras de la ropa.
- Es importante disminuir el contacto con otros irritantes, como el humo del tabaco, polvo, caspa de animal, lana, etc. ya que pueden empeorar la reacción alérgica.
- Ayudarse con fármacos indicados por algún especialista, como los llamados antihistamínicos. Los cuales tienen un efecto sobre la picazón de nariz, los estornudos, la picazón en general. El otro grupo de fármacos que se usan son los corticoides nasales, que son inhaladores que se ponen en la nariz con un muy buen efecto sobre la obstrucción nasal, sobre la mucosidad y también sobre la mejoría del olfato.
- Terapias complementarias con acupuntura u otras terapias, para activar y generar inmunidad natural, en la cual la persona va a desarrollar una inmunotolerancia lenta y progresiva, generando una modulación de la respuesta inmune, que va a tener un efecto más duradero en el tiempo.
- Finalmente, en los casos más severos, existen tratamientos más innovadores como la inmunoterapia con vacunas.
