Estudiantes de la carrera de Agronomía del Convenio UPA UTEM, participaron de actividades prácticas en Laboratorios, esto en el marco de las asignaturas de Introducción a la Bioingeniería y de Procesamiento de Productos, al respecto el coordinador del área de Agropecuaria y Veterinaria, Carlos Escobar Araya, destacó: “Justamente este tipo de actividades prácticas es el espacio propicio para un aprendizaje profundo de los estudiantes, con énfasis en el desarrollo de habilidades propias del quehacer profesional.”
La actividad de laboratorio que realizaron los estudiantes tuvo por objetivo detectar la presencia de enzimas en distintos detergentes de uso comercial, mediante una técnica de determinación indirecta de éstas, a través de la capacidad que poseen para degradar sustratos de gelatina, crema de leche, almidón de maíz y catafilos de cebolla, identificando la presencia de proteasas, celulosas, lipasas y amilasas, que podrían degradar los nutrientes que existen en esos alimentos.
Al respecto el docente de la asignatura y a cargo de realizar la actividad en el laboratorio, el Ingeniero Agrónomo Edgardo González Leiva, planteó: “como parte de la asignatura se requiere evidenciar que en la actualidad la elaboración de detergentes con las enzimas que contienen, constituyen un proceso biotecnológico, lo que permite comprobar que la biotecnología moderna se hace cargo de la elaboración de productos biotecnológicos a gran escala, como los detergentes, por lo que este tipo de instancias favorece el aprendizaje de los y las estudiantes, en el que se destaca el rol protagónico que éstos asumen en las actividades prácticas de laboratorio”.
En el mismo sentido, la profesora Silvana Saavedra a cargo de la asignatura de Procesamiento de Productos, explica que la finalidad de los laboratorios realizados en esta primera parte del semestre correspondió a talleres de simulación del proceso de industrialización de alimentos a pequeña escala, con énfasis en las buenas prácticas de manufactura e inocuidad alimentaria, como el lavado de manos, retiro de accesorios, higiene personal, limpieza de superficies, entre otras. “En este caso la inocuidad es entendida como; un alimento inocuo es aquel que esta apto para el consumo y que no pone en riesgo la seguridad alimentaria de las personas, no presentando ETAS – Enfermedades de Transmisión Alimentaria”. Comentó la docente.
Finalmente, las estudiantes Javiera Garrido y Yanis López manifestaron que, “este tipo de experiencias son muy interesantes, como futuras agrónomas estamos conociendo los distintos procesos de manufactura de materias primas, tales como, frutas, verduras y leche, algo que nosotras mismas como profesionales estaremos a cargo de producir en el futuro”.